
Y bueno, ayer vine pero ya ni tiempo tuve de escribir, al cabo sólo iba a comentarles que me encanta la combinación del labial Perfect Wear Chocolate Truffle y el lip gloss de kiwi/melon de Avon, se me ve bien padre … ah! y que hice una sopa de tomate bien matona, y se le echan unos twistos de sabritas encima, y pa’ que les cuento! ‘Iren!:
Pero ya, a lo que te truje Chencha…
Hoy empecé oficialmente con los preparativos para thanksgiving, así que por lo general se comienza con el postre, y como se podrán haber dado cuenta, hice cupcakes, que no van a ser el único “postre”, sino que son parte del postre, más bien es para los niños, y cumplen una función muy especial de decoración de la mesa.
Me pasé casi 12 horas en ésto, entre que tuve que ir a las 7 am a HEB por la mantequilla (que dicho sea de paso: Qué buena mantequilla la de la marca propia de HEB!) y ponerme en friega loca a trabajar:
Primero, a hacer las galletas… sí, éstos cupcakes llevan 3 galletas de mantequilla y especias cubiertas de fondant cada uno, y aquí empezaron los problemas: las galletas estan RI-QUÍ-SI-MAS y éso fué el problema, porque la niña chef y chefito no más no me daban oportunidad de juntar las 72 galletas que necesitaba para decorar 24 cupcakes , pero al fin pude terminarlas:
Ahora, a preparar la mezcla de especias para pay y colorear el fondant; la mezcla de especias de pay me gusta hacerla con éstas proporciones: 1 parte de clavo, 1 parte de jengibre y 4 partes de canela, todo se mete al Magic Bullet, y voalá! Y había que pintar el fondant en los colores del otoño:
Y luego la niña chef me ayudó a mezclar los ingredientes secos del pastel, y cabe aclarar que es PASTEL de calabaza y especias, no MUFFIN, la preparación entre uno y otro son distintas, aquí sólo sustituí la leche por la calabaza en puré, y era el mismo proceso de combinación del yellow cake.
Y ahora sí, como me encontré un dulce de esos de membrillo que luego uno no sabe cómo comérselos, pues lo hice cuadritititos y se lo eché a la masita , y al horno… tic, tac, tic, tac… y el olor… de ése que te mata de hambre aunque hayas acabado de comer, y es que las especias huelen taaaan rico…
Y mientras se horneaban tuve que preparar otros 2 tipos de betún: el vanilla ice cream buttercream (mi favorito) y meringue icing, para los toques finales, y luego busqué entre mis curiosidades y resulta que sí tenía nonpareils de corazones! YEY! y bueno, así quedó el asunto, y ya me voy al starbucks a descansar
Bye, byeeee!
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